19 AGO (MIA).- Lupillo Rivera, juez de «El Retador» (Univision), frente a las cámaras disfruta del suspenso del reality que se transmite los domingos en Estados Unidos, y en casa lucha por cumplir su mayor reto: dar un buen ejemplo a sus hijos. Algo que ahora no le resulta tan fácil debido al distanciamiento con su hermano Juan y los dimes y diretes después de la auditoría que se hizo a las empresas de Jenni Rivera, que provocaron su salida de la misma.
- ¿Qué es lo que más te gusta de «El Retador»?
Que es un concepto realmente diferente a varios realities que hay y la verdad me gusta, porque siempre está como en suspenso la situación.
- ¿Qué consejo le das a los concursantes?
Yo les recomiendo igual. Tienen una sola oportunidad de convencer a los jueces y de convencerse ellos mismos, de convencer a todo el público que está viendo el programa y tienen que llegar con esa actitud, llegar al cien por ciento, siempre.
- ¿Cómo van las cosas con tu hermano Juan?
Los hermanos son los hermanos que Dios nos mandó y en una familia no existen mejores hijos que otros. Simplemente somos diferentes, somos como los dedos de la mano, todos diferentes.
«Yo le deseo lo mejor del mundo a cada uno de mis hermanos y que Dios me los bendiga y Dios no me olvide a mí tampoco, ¿no?».
- ¿Habrá reconciliación entre ustedes?
Yo tengo que dar un ejemplo bueno siempre a mis hijos, yo creo que eso es lo más importante. Los hijos lo ven a uno como padre y yo no quisiera que mis hijos crecieran con esa actitud de que está bien que discutan los hermanos siempre; entonces, ellos siempre me han visto a mí en la mejor disposición, y mejor trabajar.
«Pero se toman dos personas, ¿no? para que funcionen las cosas. Entonces, mucha gente dice que yo soy el que tengo problemas con él, pero yo ando trabajando, yo no tengo absolutamente ningún problema con él».
Jennifer García/MezcalTV
Prohibida su reproducción parcial o total. La copia o distribución no autorizada de este artículo y su correspondiente imagen infringe los derechos de autor.